La boca contiene centenares de bacterias, virus y hongos, esto es perfectamente normal excepto cuando se altera el equilibrio de los microorganismos que la habitan porque un aumento de alguno de ellos puede provocar infecciones.
El desequilibrio puede estar provocado por distintas causas: una alimentación inadecuada, consumo de tabaco o una mala higiene bucal.
Según el libro blanco de la salud bucodental española publicado en 2020, el 65% de los españoles afirma preocuparse por su salud bucodental. Los problemas bucodentales más frecuentes percibidos por la población son los dientes sensibles (25%), las caries sin tratar (19%) y las encías sangrantes (19%). En España, 1 de cada 3 de adultos sufre enfermedad periodontal y de ellos 1 de cada 13 llega a desarrollar una periodontitis severa. La higiene y las visitas periódicas al dentista son imprescindibles para mantener la salud bucal que además puede influir en otras patologías comunes.
La higiene y la prevención el arma más eficaz
- Importantísimo: el cepillado
El cepillado dental es un hábito indispensable para prevenir enfermedades dentales, para que sea eficaz, es importantísimo cepillar dos veces al día la boca con pasta fluorada y que la duración del cepillado no sea menor a 2 minutos. No hay que tener prisa. Además, en el ritual de higiene no hay que olvidar los espacios interdentales, que se deben limpiar con hilo dental.
¿Sabías que no hay que mojar el cepillo antes de usarlo? Los expertos recomiendan que se enjuague al final y se seque al aire, sin capuchón para evitar la aparición de bacterias.
El cepillo además debe tener cerdas de dureza media o blanda para no dañar las encías.
Por último, hay que destacar que los cepillos eléctricos remueven mejor la placa y reducen un 20% más la gingivitis
En cuanto al enjuague bucal o colutorio, se debe considerar un líquido medicinal con un fin concreto, su uso, no debe ser generalizado sino, adaptado a cada paciente en particular.
- Revisiones al dentista
De media se calcula que cada euro que se invierte en prevención oral ahorra 20 euros de tratamiento posterior.
La frecuencia con la que debemos visitar al dentista depende de muchos factores como, la edad, la salud bucal de cada persona, patologías o tratamientos previos, pero sí existe un común acuerdo de que una persona sana debería acudir a revisión una vez al año o cada 6 meses.
Las revisiones las debemos realizar porque la mayoría de las patologías que podemos tener son difíciles de detectar hasta que no están en un estadio avanzado. Es el caso, por ejemplo, de la caries que, al principio, ni se ve ni duele. Lo mismo ocurre con la enfermedad periodontal o el cáncer oral. Acudir al dentista periódicamente permite mantener nuestra salud oral en niveles óptimos y nos puede ahorrar costosos tratamientos posteriores.
Una época en la que se debe tener un especial cuidado con la salud bucal y acudir al dentista para revisión es durante el embarazo, tener las encías sanas aumenta las posibilidades de que el parto no se adelante.
Enfermedades bucales más frecuentes
Las caries y la conocida como enfermedad periodontal (piorrea) son las dos enfermedades bucales más frecuentes según el Consejo español de dentistas.
1 – La enfermedad periodontal afecta a la salud de las encías, que son los tejidos que rodean y soportan los dientes.
La mala salud de las encías es una de las principales causas de la caída de dientes en los adultos. Como la mayoría de las enfermedades silenciosas es indolora, y es posible que una persona con las encías enfermas no sepa que la padece. El porqué de la infección y enfermedad de las encías es la placa, son bacterias que en forma de película se quedan sobre los dientes.
Aunque es una enfermedad indolora, sí hay pistas que podemos detectar para controlar la salud de la boca y evitar una piorrea. El aspecto debe ser rosa, no tiene que sangrar y debe estar pegada a los dientes.
Cuando padecemos una gingivitis, la encía se suele inflamar y sangrar. En ese momento aumentando la higiene bucal y acudiendo al dentista, no debería haber mayor complicación. Pero si no controlamos la inflamación y los sangrados aparecen con frecuencia la enfermedad puede progresar y afectar al hueso que rodea a los dientes de manera irreversible.
2 – Las caries son probablemente la enfermedad bucodental más conocida.
Afecta prácticamente a la totalidad de la población adulta y al 33% de los menores de 6 años. La caries la provocan las bacterias orales al descomponer azúcares y convertirlos en ácido durante un tiempo. Esto provoca la formación de una cavidad en el diente debida a la desmineralización de los tejidos duros (esmalte y dentina). La gravedad puede ir de una lesión mínima en el esmalte, hasta afectar gravemente el nervio. Requieren intervención del dentista para restaurar el diente a su estado normal y evitar el deterioro que provoca la pérdida.
Enfermedades comunes relacionadas con enfermedades dentales
Pensar que las enfermedades dentales afectan solo a la boca es minimizar los riesgos. Las enfermedades periodontales afectan a mucho más que a los dientes. En los últimos años hay estudios que señalan cómo las bacterias responsables de la enfermedad de las encías, pueden pasar al torrente sanguíneo a través de pequeñas arterias de manera que pueden alcanzar órganos vitales. Las enfermedades bucales pueden desencadenar patologías comunes como enfermedades cardiovasculares, el Alzheimer, los accidentes cerebrovasculares, el empeoramiento de la diabetes o determinadas complicaciones del embarazo.
Mantener una adecuada salud gingival es, por lo tanto, un asunto serio de salud.